El Tercer Ciclo de la Educación Escolar Básica está dirigido a la población de niños/as adolescentes de 12 a 16 años - Ley Gral. de Educación 1264 comprende el Séptimo, Octavo y Noveno grados.
El Tercer Ciclo de la Educación Escolar Básica está dirigido a la población de niños/as adolescentes de 12 a 16 años - Ley Gral. de Educación 1264 comprende el Séptimo, Octavo y Noveno grados.
Aborda una propuesta curricular que permite dar continuidad a las competencias, habilidades y capacidades iniciadas en la Educación Inicial de manera secuencial y armónica conforme a los delineamientos propuestos por el MEC y las orientaciones emanadas de la Congregación de las Hermanas de Nuestra Señora de la Inmaculada concepción de Castres. Incorpora las actividades lúdicas y las innovaciones como herramientas fundamentales para el desarrollo integral del niño, respetando su edad y su condición. Propone una praxis transformadora en donde convergen la ciencia, la fe y la vida desde un enfoque multidisciplinar considerando la formación tecnológica inicial y la incorporación de lengua extranjera como formar de integrar al mundo con sus exigencias actuales.
Brinda los espacios necesarios para incrementar el saber en forma secuencial para dar continuidad a lo desarrollado en el Primer Ciclo de manera que en forma natural se dé el proceso de desarrollo de las competencias, las habilidades y las capacidades necesarias para apuntalar una formación sólida e integral que le permita al estudiante seguir con el proceso mediante la incorporación de herramientas tecnológicas y pedagógicas que permitan afianzar los saberes. Procura que la ciencia, la fe y la vida converjan en un espacio de construcción única que permita incorporar paulatinamente los saberes construidos socialmente conforme a las orientaciones recibidas del MEC, la Iglesia y la Congregación. Se complementa la formación cristiana iniciada en el hogar y se afianza a través de los sacramentos de la reconciliación y la eucaristía. Incorpora la enseñanza de idiomas extranjeros como forma de dar apertura a los niños como ciudadano de un mundo global.
Busca articular los saberes referidos al conocer, al hacer, al ser, al convivir y al emprender; considera que el vínculo de estos aprendizajes permite el desarrollo de las competencias, habilidades y capacidades que facilite al estudiante comprender, entender y realizar acciones a favor de su comunidad y de su propia formación. Apunta hacia la innovación, la tecnología y el desarrollo de la formación humana y espiritual e incorpora a los sacramentos como medio de acrecentar la fe y accionar a favor de los demás mediante la asunción de compromisos eclesial y comunitario. Desarrolla las habilidades comunicativas en lenguas extranjeras como forma de asumir conciencia de ser ciudadano de un mundo global.